miércoles, 24 de octubre de 2012


 
Orlando Terré: “todos podemos, todos debemos”

Un sujeto en movimiento fue la exhortación del académico cubano, presidente de la OMEEDI

Periodista Rudens Tembrás Arcia. Foto: José R. Rodríguez Robleda.

Las conferencias magistrales del académico cubano Orlando Terré Camacho, presidente de la Organización Mundial de Estimulación, Educación y Desarrollo Infantil (OMEEDI), suelen ser espacios para la recreación, el disfrute, la alegría, el aprendizaje y el movimiento. Y todo ello al mismo tiempo, en una simbiosis impresionante.

Así ocurrió este viernes en la inauguración de la I Convención Mundial de Psicomotricidad, con sede en el Palacio de Convenciones de La Habana y a la que asisten académicos de unos 40 países y más de 38 universidades.

La ponencia titulada Resignificar la actividad física para el desarrollo integral y el mejoramiento de la calidad de vida, motivó infinidad de sensaciones en los más de 1.300 delegados presentes, y se sustentó en el análisis de la vinculación entre actividad física, cultura y desarrollo humano.

Terré, siempre amistoso y provocador, aseguró que cualquier valoración sobre la calidad de vida de los individuos debe profundizar en los estilos y el nivel de vida de cada uno de ellos.

Para ilustrar la situación actual refirió informes de la Organización de Naciones Unidas (ONU) que aseguran que una de las diez causas más importantes de disfunción e incapacidad a nivel global es la falta de actividad física.

Ello porque entre el 60 y el 85 por ciento de la población mundial no realiza suficiente actividad física, lo cual repercute negativamente en la salud mental y física de la población mundial.

Para mayor problema, el propio organismo afirma que en el año 2020, las enfermedades no contagiosas, muchas de las cuales son provocadas por el sedentarismo y la obesidad, serán el 73 % de la mortalidad infantil.

Su llamado a la comunidad científica y educativa fue expresado en la frase “todos podemos, todos debemos”, que reflexiona sobre una gama de asuntos medulares.

“Más que un cuerpo, es un sujeto el que se mueve; debemos escuchar a nuestro cuerpo, él somatiza, nos avisa de sus riesgos y necesidades; sea inclusivo, no excluyente en su vida cotidiana; desarrolle estilos de vida basados en la actividad física sistemática, pues ello eleva la autoestima y limita el estrés”, enumeró.

Por eso, continuamente, el experto motivo a su auditorio para que bailara, riera, reconociera su cuerpo, se auto besara y aplaudiera a los demás y así mismo.

Sobre las ventajas de llevar una vida en movimiento aseguró que posibilita una vida plena y equilibrada, saludable, longeva y sin sobrepeso ni obesidad. También se refirió a las ventajas para las prácticas sexuales, la energía, la calidad del trabajo y  estudio, así como para evitar la muerte prematura.

En el cierre de su intervención presentó el documental Almas Ricas, del periodista cubano Aurelio Prieto, sobre la obra de la Revolución Cubana en la atención a niños con discapacidad.

Una ovación cerrada despidió el emotivo encuentro con Orlando Terre, quien sin dudas es un profeta del amor y al que le fuera entregado en CUBA el PREMIO MUNDIAL DE LAS CIENCIAS EUREKA 2012, por sus labor a favor de la infancia mundial y su producción de más de 32 libros publicados.